Antes de llegar a Irlanda realmente tenía pocas referencias de este país: su actual crisis económica, sus increíbles acantilados, su cerveza Guinness, U2, el día de San Patricio…pero no es sino cuando visitas un lugar cuando las referencias previas toman otra perspectivas y conoces otras que finalmente te permiten recrear un imaginario más cercano a la realidad.
Irlanda no es una isla para llegar a una ciudad y quedarse allí. Por su tamaño relativamente pequeño, buenas vías de comunicación y Bed&Breakfast por doquier es un país para coger un coche y perderse entre el verdor que la lluvia cotidiana le imprime al paisaje.
Recientemente tuve la oportunidad de recorrer parte del oeste de Irlanda. Fue mi primera vez en este país y en mediodía de viaje ya había llegado a la conclusión de que el próximo viaje que realizaría por esta isla sería en plan roadtrip.
Este primer acercamiento al país me permitió definir al menos un recorrido que me gustaría compartir en caso de que en algún momento tú también te animes a conocer este país.
La llegada a Irlanda la hice por el Aeropuerto de Dublín. De allí partimos rumbo al oeste por la carretera N6. Primera parada: Kilbeggan.
Kilbeggan
Conocido por estar rodeado del río Esker y sus colinas de arena que aún sobreviven a la edad del hielo glacial. Lo más interesante de este pequeño pueblo irlandés es que posee la destilería más antigua del mundo: Locke´s Distillery.
Fue establecida en 1757 y la razón por la cual se asentó en este pueblo es porque ya se tenía a mano los principales recursos naturales para la producción de Whiskey: suministro de césped listo para el calor, cereales cultivados y agua pura del río Brosna.
Allí tendrías la posibilidad de probar un sorbo de Whiskey sin destilar. Más que un sorbo yo recomendaría sólo mojarse los labios porque posee un grado alcohólico de más de 70%.
Galway
Si seguimos de Kilbeggan hacia el oeste por la carretera N6 nos encontraremos con la ciudad de Galway, ubicada en el condado que lleva el mismo nombre.
Su pequeña bahía y las calles medievales del centro la hacen una ciudad muy entrañable. Por eso también se le conoce como “la Bahía de Galway” o la ciudad de las 14 tribus, ya que durante la Edad Media fue dominada por 14 familias muy poderosas.
Para los irlandeses es una ciudad muy familiar, muchos dublineses poseen una segunda residencia o casa de veraneo en Galway.
Pero lo que más destacaría de esta pequeña ciudad es su agradable vida nocturna. Quizás influye el hecho de que sea una ciudad universitaria, los pubs de Galway están siempre abarrotados de gente y buena música. Si vas solo eso no es problema porque allí descubrí lo social que pueden ser los irlandeses.
Abadía de Kylemore en Connemara
Partiendo desde Galway hacia el oeste por la carretera N59 está la región de Connemara que, rodeada de Mar Atlántico por el norte, sur y oeste, posee una sutil naturaleza con sinuosas montañas y el agua como protagonista gracias también al inmenso lago Corrib.
También es el lugar donde se conserva intacto el idioma gaélico, muchos jóvenes de Dublín y otras ciudades son enviados a la Gaeltacht, zonas donde aún se habla gaélico, entre ellas toda Connemara, para perfeccionar el idioma.
Es esta zona se encuentra la Abadía de Kylemore, un antiguo castillo y posteriormente convento que data de 1863, que impresiona no sólo por el lugar privilegiado en el que se encuentra (frente a un lago y rodeados de verdes montañas), sino también por la dramática historia de su construcción.
Henry Mitchell, un empresario originario de Manchester, llega a esta zona de la cual su esposa queda prendada completamente. Para demostrarle su amor decide construirle un palacio en el que viviría poco tiempo, pues muere trágicamente tras sufrir una repentina y grave enfermedad cuando fueron de vacaciones a Egipto.
Lisdoonvarna, el pueblo del amor
“El pueblo de los solteros”, así se le conoce a Lisdoonvarna por su famoso festival de solteros que realizan cada mes septiembre.
Lisdoonvarna Matchmaking Festival es el evento para solter@s más grande de Europa. Por un mes entero solteros no sólo de Irlanda, sino del resto de Europa se reúnen en este pueblo para conocer gente y los más afortunados el “amor de su vida”. Para ello organizan show de danza, música, fiestas que empiezan a las 12 del día y finaliza hasta bien entrada la madrugada.
Tal es la fama de Lisdoonvarna que Coca Cola le ha dedicado un diseño a sus latas en honor a su afán por juntar solteros.
Acantilados de Moher
Ubicado en el extremo suroccidental de Irlanda y perteneciente al Condado de Clare, los Acantilados de Moher son unas impresionantes formaciones rocosas que llegan a tener una altura máxima de 214 metros. Se puede apreciar desde el mar a través de unos ferrys que parten desde el muelle de Doolin (www.doolin2aranferries.com) o desde el mismo acantilado, en el Visitor experience center (www.cliffsofmoher.ie).
Para poder tener un acercamiento de lo impresionante del paisaje me ha gustado mucho el vídeo realizado por Maroon 5 para su sencillo Runaway. Utilizaron estos acantilados para filmarlo…realmente impresionante!
[youtube http://www.youtube.com/watch?v=UzCcgwtvOf0&w=450&h=345]Lahinch
Pueblo famoso por tener las mejores olas de toda Irlanda para hacer surf. La vida en este pueblo pareciera girar en torno a este deporte: todas las calles del centro están repletas de tiendas de artículos de surf y es más común ver a un chico o chica de pelo largo rubio por el sol –quizás no de surfear en este sitio, sino en Canarias-, muy delgado y con tabla de surf en brazos.
Para los que ya han tenido la experiencia de surfear creo que es una opción exótica para hacerlo, y para los que no pues podéis leer mi experiencia sobre mis intentos de deslizarme sobre las olas.
Más información:
Oficina de Turismo de Irlanda